domingo, 10 de abril de 2011

Manel y La Ley antitabaco en Salud Mental: ¿Discriminación positiva o negativa?


La Ley antitabaco o Ley 42/2010 (reforma de la “Otra” Ley antitabaco 28/2005) aplicada desde el 2 de Enero de 2011, según el BOE de 30 Diciembre, lucha contra el tabaquismo en lo que se refiere a la prohibición de fumar en lugares públicos como a las medidas encaminadas a potenciar la deshabituación del tabaco y a tratar de erradicar a medio y largo plazo el hábito de fumar.

El BOE, señala que transcurridos más de cuatro años de aplicación de la Ley 28/2005, es patente, como se desprende de diversos estudios realizados al respecto, la necesidad de avanzar en la protección de la salud de los ciudadanos ampliando la prohibición de fumar en espacios públicos cerrados y colectivos, lo que, por otro lado, satisface las demandas de los ciudadanos, como corroboran encuestas oficiales recientemente realizadas.
Parece una Ley exitosa, admitida y con altas expectativas de ser integrada totalmente por nuestra sociedad.



Sabemos que hay excepciones en la aplicación de la Ley antitabaco, como es el caso del sector Salud Mental (y penitenciario) son parte afectada, y después de 3 meses de experiencia con la Ley, como profesional de la Salud Mental merece una primera reflexión:
Claramente hoy en día es una Ley encaminada a aumentar los espacios libres de humo del tabaco, pero sin alternativas o estrategias de afrontamiento efectivo dirigida hacia la población fumadora. Creo que antes o durante (como indica el artículo 12 de la Ley) aplicar la Ley se debería haber facilitado al acceso a tratamientos de deshabituación tabáquica, cuya eficacia y coste-efectividad haya sido avalada por la evidencia científica, y porqué no, la creación de unidades especiales de deshabituación tabáquica para los grupos prioritarios que resulten más vulnerables.

Una segunda reflexión: se ha extendido en la sociedad (incluido profesionales) la creencia de que en los servicios de Salud Mental se "está permitido fumar hasta en los lugares cerrados", incluso en despachos, habitaciones, comedor con el café...como en su casa!!. Pero la sorpresa es mayúscula cuando se les informa o advierte (según mi experiencia) de que AQUÍ TAMPOCO SE FUMA!! y lo podemos aclarar con la lectura del párrafo de la Ley: "Disposición adicional octava. Centros o establecimientos psiquiátricos. En los establecimientos psiquiátricos de media y larga estancia se permite fumar a los pacientes en las zonas exteriores de sus edificios al aire libre, o en una sala cerrada habilitada al efecto, que habrá de estar debida y visiblemente señalizada y contar con ventilación independiente o con otros dispositivos para la eliminación de humos".

La Ley no habla de distancias (metros), el Centro no es responsable más allá de sus puertas, observando con normalidad a los ciudadanos fumadores todos los días como fuman en la calle, salidas(es lo que vemos) o alrededores de cualquier Servicio de salud. Y en lugares cerrados, se especifica, sólo en Unidades Psiquiátricas de media y larga estancia en salas habilitadas para ello, nunca en habitaciones o salas comunes. Mi duda pesimista es que existan(o se habiliten de verdad) lugares o salas adecuadas como se indica en la Ley, y donde no pueden ser utilizadas por profesionales ni familiares con el objetivo de proteger su salud (ya que no deben estar expuestos al humo).
Añadir animando a la reflexión y al diálogo de que el fumador sufridor(ingresado) debe fumar según "los otros", las normas del servicio o profesionales referentes; lugar (normalmente pequeño), horarios (rígidos y espaciados), con puertas (restrictivas), no se fuma desde que anochece hasta el amenecer...y con la condición de que las personas deben ser autónomas. Y ¿qué pasa con las personas que no puede salir a fumar o no tienen permisos?, ¿y las personas que precisen aislamiento o contención mecánica?, ¿deben ser acompañadas para fumar por los profesionales?...según la Ley, los trabajadores no deben exponerse a los humos.

Y si además, como ocurre en Cataluña, el Centro pertenece a la red de Hospitales sin humo “Xarxa Catalana d’Hospitals sense Fum" (XCHsF), Conlleva una serie de responsabilidades, supervisiones periódicas, acciones y sanciones en el caso de incumplimiento ante la Ley, donde se prohíbe fumar en las entradas, zonas de paso, áreas ajardinadas y de aparcamiento de coches. Los Usuarios de Salud Mental (media y larga estancia) sólo pueden fumar temporalmente en zonas de uso público, como otro ciudadano…entonces ¿dónde está “tal favoritismo” y la discriminación positiva? ¿y con el paciente no autónomo? todavía se hace más “retorcido e insoportable” para todos.

Y una tercera reflexión (personalmente la que más me preocupa): injustamente la Ley, y rápidamente la sociedad considera una vez más a las personas con enfermedad mental de manera diferente al resto. Llevamos muchos años luchando contra el estigma, la discriminación y la marginación de las personas con enfermedad mental. No queremos que sean diferentes a las personas con otras enfermedades. ¿a qué viene que una nueva ley normalice y sancione una nueva discriminación? ¿Que es positiva y necesaria para ellas? Dicen que fumar les ayuda a sobrellevar sus problemas o la misma enfermedad. ¿Hay estudios que dicen que no pueden dejar de fumar, que la nicotina tienen efectos psicotrópicos en sus cerebros, que les ayuda a tolerar los tratamientos...se ponen menos ansiosos, angustiados? eso no son ni datos “pre-científicos”. Nadie mejora, ni se cura por fumar.

Pero todo eso son superficialidades de las que sólo pueden opinar quienes no saben de qué hablan, quienes no han visitado nunca un servicio de “media y larga estancia”, y menos aún, la sala de fumadores. Son insalubres, indignas, antiestéticas, antinaturales, fomento de gueto, verdaderos reductos de marginalidad…la madre de todas las marginaciones, “la foto” que confirma; el estigma más agudo de todos los estigmas.

Años estudiando, analizando, investigando los riesgos de la salud física de los enfermos mentales. Sabemos que los problemas metabólicos, cardiovasculares, respiratorios, la obesidad, la inactividad, etc. afectan mucho más a estas personas que a la población general. Que esos son los problemas de salud más graves y que más limitan y acortan sus vidas. Las sociedades científicas y agencias estatales intervienen en estos estudios y promueven estrategias y programas de prevención y tratamiento. Es más, se culpa a ciertos fármacos de estos problemas, se regula su prescripción y casi se los estigmatiza. Pero al tiempo, con la Ley antitabaco, se tolera, se normaliza el tabaquismo en las personas con enfermedad mental grave, las que tienen más riesgos físicos, más inactividad, más tratamientos... esas son, justamente, las que entran en esos guetos, donde fuman lo suyo y lo de los demás, y si apuramos ahora fumarán sus médicos, enfermeras, cuidadores… Pero puede que aún haya quien argumente: "El artículo veinticuatro es un regalito de los Reyes Magos para los pobres afectados por enfermedad mental y adicción tabáquica". Pues vaya regalito. ¿No sería mejor que nos lo tomásemos en serio y dotásemos de los medios adecuados para que esas personas tan marginadas, necesitadas e injustamente estigmatizadas viviesen mejor, más sanamente y con menos humos?
Fuente: BOE, Jesús de la Gándara (Psquiatra Blogguero)


Os dejo con un grupo de Barcelona llamado Manel, un grupo de pop-folk y música tradicional catalana que ha triunfado a nivel estatal con más de 10.000 copias vendidas con su 2º disco “10 Milles Per Veure Una Bona Armadura” (2011) (escuchar el disco entero). Aunque para mí es mejor disco el primer disco “Els millors professors europeus”(2008) (escuchar el disco entero).

Manel- Aniversari, es tema melódico y redondo sobre deseos y expectativas, una canción y trabajado video, maravilloso, una obra de arte.


11 comentarios:

  1. Hola Hilari:

    PAra mí lo que es una discriminación es la ley antitabaco en sí misma. Los que somos fumadores parecemos casi unos apestados. De todos modos vamos a lo que vamos. Durante alguno de mis ingresos en agudos no estaba permitido fumar y tío se pasa fatal. Si un fumador cualquiera ya tiene dificultad para estar un día sin fumar, imaginate en medio de una crisis. Te entran ganas de pegarte un tiro y ni parches ni leches. A mi me parece muy bien que se tomen medidas a favor de los no fumadores (la ley ya estaba bien como estaba antes de la última modificación). Pero que no me jodan, diciendo que el deficit en salud publica es por culpa de tabaco, porque por ahí no paso. Para muestra un botón: Al inicio de esta crisis la mayoría de estados occidentales tuvieron que acudir al rescate de las entidades bancarias con miles de millones en ayudas, a causa de la mala gestión de éstas. Después de tres años las arcas de la mayoría de estados continúan casi vacías y en cambio los bancos (los mismos que provocaron la crisis) tienen benefecios de hasta 38.000 millones de euros como es el caso del Santander. En resumen, que sí, que el tabaco no es demasido bueno, pero tampoco es la causa del deficit,
    y decir que es la de la mayoría de enfermedades que dicen me parece un subterfugio interesado por parte de ciertas instituciones. Puestos a prohibir que prohiban la nucleares, los coches, el plastico, los vertidos, etc.

    Saludos!!

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  2. Hola Raúl, millones de gracias por entrar en el blog.
    Totalmente de acuerdo con que la Ley antitabaco discrimina a los fumadores, y como pasa con otros colectivos comienzan a tener un rechazo y una falta de derechos como ciudadano…o por lo menos, derechos adquiridos que poco a poco se los están quitando. Lo próximo será que los fumadores se pondrán a la cola de los no fumadores para poder acceder a la salud (intervenciones, transplantes…).
    Aunque no comparto la idea de la discriminación positiva hacia las personas ingresadas en un hospital, y menos en agudos…¿tú te imaginas una persona fumadora operada de corazón que pueda fumar al tercer día, semana de la intervención? TODOS SOMOS IGUALES, es nuestra lucha!! El derecho a la igualdad en general (pero con la salud es innegociable) conlleva beneficios, oportunidades…creo que esta ley estigmatiza al paciente mental con marcas, fomento y favoreciendo prejuicios y estereotipos como la compasión (“pobrecitos”), incapacidad y falta de voluntad (“dejemos que fumen que no podrán afrontarlo”), falta de auto-responsabilidad (“ no cumplirán con la Ley”) y temor o miedo (“dejemos que fumen, mejor eso que tengan crisis…” ), pero lo retorcido y la mayor contradicción, es que realmente LA PERSONA QUE ESTÁ INGRESADA EN UNA UNIDAD DE SALUD MENTAL NO PUEDE FUMAR por problemas estructurales, la falta de salas habilitadas para fumadores, por dificultades de la persona respecto a desarrollar su autonomía o de libertad para aumentarla por parte de “otros” (asimetrías de poder).

    Completamente de acuerdo con tu reflexión sobre la crisis, los bancos y las nucleares…ya sabes!! “El sentido común es el sentido menos común de los sentidos”…y normalmente tienen mucha falta los que tienen poder y responsabilidades mayores.

    Un abrazo!!

    Hilari

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  3. pero lo retorcido y la mayor contradicción, es que realmente LA PERSONA QUE ESTÁ INGRESADA EN UNA UNIDAD DE SALUD MENTAL NO PUEDE FUMAR por problemas estructurales, la falta de salas habilitadas para fumadores, por dificultades de la persona respecto a desarrollar su autonomía o de libertad para aumentarla por parte de “otros” (asimetrías de poder).

    AMEN, Hilari.

    Como fumador ya digo que prefiero poder fumar, pero desgraciadamente esto en la mayoría de hospitales con plantas para agudos es estructuralmente imposible.

    Un abrazo y ah, por cierto, gracias por los ánimos que me has enviado en mi blog; sólo una matización: todas las personas somos de alguna forma cuidadores, otra cosa es que sea perjudicial acabar enquilosados en ese rol. También tenemos derecho a vivir.

    Un abrazo!!

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  4. ok y Gracias Raúl!!

    Me gustaría e intentaré estar en la presentación de tu libro!!

    Un abrazo

    Hilari

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  5. Me cuesta ver la legitimidad de alguien para negar la libertad de movimientos a nadie sin mediar violencia por medio. Siento ser tan crudo pero la mayoría de los ingresos a pacientes psíquicos son arrestos, y desde luego con escasa revisión judicial a tenor de la arbitrariedad en que termina desacomplejada convirtiéndose la contención mécanica y/o química. No sólo me parece mal que no se deje fumar bajo estas condiciones privativas sino que tampoco se permita tomar café. Ambas son drogas se acepta pero digamos "de sosiego", la distancia entre aquellas que pueden crear conflictos interpersonales es muy nítida. Creo que poco o nada se plantea la psiquiatría como una disciplina que supone manejar involuntariamente a un sujeto, al menos en parte, esto es muy importante, consciente de sí. Se hace y ya está se escurre el bulto. Yo que soy exfumador pero un cafeínomano impenitente agradezco que ese furor amoris entre la medicina y el gobierno por la cada vez más asfixiante intervención se haya autolimitado, al menos en este tema. Si no está claro que la salud es de cada uno habrá que acabar poniéndole precio. La cosificación además de rutinaria nos sobra. Al menos un paciente físico tiene como opción negarse al tratamiente. No sé si tutearte, Hilari, pero desencántate, mientras la coacción frente al paciente psicótico sea la norma y no la excepción no puede hablarse de igualdad.

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  6. Hola anx!! gracias por tu comentario, y por supuesto me puedes tutear.

    Qué grandes frases o afirmaciones:

    "Me cuesta ver la legitimidad de alguien para negar la libertad de movimientos a nadie sin mediar violencia por medio"

    "Si no está claro que la salud es de cada uno habrá que acabar poniéndole precio"

    Sin palabras...eso sí, "déjame" que mantenga esperanza y motivación para luchar por una Salud Mental no judicializada, defender sus derechos equitativos a la otra salud, eliminar estigma(discriminación y rechazo) social, fomentar intervenciones o tratamientos no coercitivos ni restrictivos como el TAC, el "Empowerment", "el Paciente experto", el vínculo o la alianza terapéutica simétrica (no jerarquizada), el consentimiento informado y voluntades anticipadas previos al ingreso, la voluntariedad incondicional, la incompetencia coordinada es igual a competencia, la negociación y el diálogo protocolorizados en los códigos deontológicos de cualquier profesional de la Salud Mental...Un abrazo
    Te recomiendo un enlace http://tiralosmuros.blogspot.com/2010/05/al-tai-dale-tac-tac-tac.html
    Hilari

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  7. Somos el Club Social Marianao de Sant Boi formado en estos momentos por 56 personas con alguna enfermedad mental, de ellas 36 personas no son fumadoras. No se ha aplicado ningún programa para dejar de fumar, simplemente no fuman, no podemos afirmar enfermedad mental=fumador porque no es así. Hacemos un flaco favor a la persona con enfermedad mental que fuma y que con este tipo de medidas lo único que se consigue es quitar responsabilidad y hacer más difícil que esa persona gane más cuotas de autonomía.

    Ana Vega

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  8. Hola Ana!! gracias por pasaros...un placer.
    Millones de gracias por este comentario que demuestra que esta ley estigmatiza y discrimina negativamente (cuando quieren demostrar lo contrario) al paciente mental, ALGUNOS SE ESTAN LLEVANDO SORPRESAS!! cuando son personas que saben respetar, son capaces, voluntariosas, competentes...como cualquiera que tenga que afrontar esa dificultad "del fumar en lugares públicos".

    Un abrazo

    Hilari, NOS VEMOS!!

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  9. Buenos días!

    No estoy de acuerdo en que en las Unidades de Agudos no se pueda fumar. De hecho hasta hace bien poco tiempo existían en dichas Unidades habitáculos para tal fin que han sido transformados en salas de visita o de juegos. Me parece desproporcionada la respuesta que se les da a los enfermos psíquicos ingresados en estas Unidades cuando los encuentran fumando y les conminan a que entreguen los cigarrillos. Cuando estos se niegan a entregar dicho preciado bien, son pinchados y pasan períodos de tiempo en contención en sus camas. Quién está más loco?

    Hay que llevar estas reflexiones a los defensores del pueblo, a las asesorías jurídicas de los respectivos gobiernos autonómicos y quizás y también a los Tribunales de Justicia. Desde mi punto de vista se violan derechos fundamentales con estas prácticas. Una persona en una relación de sujeción especial como es el enfermo psíquico en estas Unidades, no carece de derechos. Es cuanto,

    Marisa González Seoane

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  10. guaaa!! me encanta el blog, siempre encuentro temas muy interesantes.

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  11. De esto se trata...de temas interesantes pero sobretodo de temas reales y "curiosos", GRACIASSSS por estar ahí.
    Buena web "Noticiascuriosas", no la conocía.

    Un saludo

    Hilari (Tira los Muros)

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hilari319@hotmail.com